Qué ver en Rusia

Uglich

Viajar a Uglich es casi obligatorio si escoges visitar Rusia y hacer un crucero por el Volga. Desde 2018 esta ciudad pertenece al famoso anillo de oro ruso, y su arquitectura es, sencillamente, espectacular. Disfruta de sus iglesias y de sus museos, sus dos atractivos principales además de los mercados de artesanía.

Viajar a Uglich: un destino para amantes del turismo religioso

El Kremlin de Uglich

En la mayor parte de las ciudades pertenecientes al Anillo de Oro, que son Sérguiev Posad, Pereslavl-Zaleski, Rostov, Yaroslavl, Kostroma, Ivanovo, Suzdal y Vladimir, además de la propia Uglich, encontrarás un kremlin. Y es que con esta palabra se designa a las ciudadelas rusas, que engloban una gran cantidad de edificios históricos.

En el kremlin podrás apreciar la arquitectura clásica rusa. En el de Uglich, en concreto, el kremlin pone de manifiesto el pasado de la ciudad como principado.

De hecho, uno de los edificios más importantes del Kremlin de Uglich es el palacio del Príncipe. También es de interés el campanario de la Catedral de Spaso-Preobrazhenski.

Iglesia de San Demetrio

Los cristianos ortodoxos rusos peregrinan con devoción a la Iglesia de San Demetrio, uno de los lugares que no puedes dejar fuera de tu itinerario cuando decidas viajar a Uglich.

También conocida como Iglesia del Príncipe Dimitri, se levanta en el lugar donde murió, se dice que asesinado, el hijo del famoso Iván en Terrible. De hecho, no hay evidencias de como murió este niño de ocho años, aunque la versión mas extendida se relaciona con luchas de poder. La guerra que se desató tras su muerte acabó con el inicio de la Revolución Rusa y el fin de la familia Romano.

Distinguirás esta iglesia gracias al color rojo de sus muros, que evocan la sangre del príncipe asesinado. Las cúpulas en forma de bulbos están rematadas por estrellas doradas y resultan impresionantes. Pero su encanto no termina ahí. El interior está decorado con frescos de llamativos colores dedicados a la vida del niño mártir.

Es probable que este sea el primer edificio de Uglich que veas, pues está a la orilla del Volga.

Catedral de la Transfiguración del Salvador

Viajar a Uglich significa visitar la Catedral de la Transfiguración del Salvador, un edificio que incorpora diferentes estilos arquitectónicos. Por fuera responde a la arquitectura tradicional rusa, igual que la Iglesia de San Demetrio, pero por dentro el templo se asemeja más a una construcción propia de la Italia del Renacimiento.

El monasterio Alexéievski

Elde Alexéievski es uno de los monasterios más antiguos de Rusia. Su fundación data del siglo XIV, aunque se destruyó casi por completo tres siglos más tarde.

Dentro del recinto del monasterio destaca la Iglesia de Uspénskaia, tan hermosa que se ganó el sobrenombre de La Divina.

Viajar a Uglich y maravillarse con los museos más pintorescos

Viajar a Uglich supone recorrer edificios realmente impresionantes, pero eso no quiere decir que el viaje deba estar teñido de solemnidad. Hay tres museos en esta ciudad que te alegrarán el día y te proporcionarán un buen montón de anécdotas que contar a tu vuelta.

Museo de las Leyendas de Uglich

Si te gusta el folklore y lo tuyo es que te cuenten historias cuyas raíces se entierren en la tradición, este es tu museo.

Y no te dejes engañar por su nombre. No solo está dedicado a la mitología rusa, sino que también hay mucha información sobre la historia verdadera de la zona. Algunas de las curiosidades reales que vas a encontrar explicadas aquí son:

La aparición del primer teléfono en la ciudad. El origen del conocido refrán «rueden la salchicha a lo largo de la calle Spásskaia». El método de elección de samovares en el siglo XIX.

Y además el edificio que lo alberga es de una gran belleza. No te pierdas el Museo de las Leyendas si viajas a Uglich.

El Museo del Vodka Ruso

Uglich es la ciudad que vio nacer a Piotr Smirnov, el rey absoluto del vodka. Así que no es de extrañar que el museo del Vodka se encuentre aquí. Visitándolo descubrirás que existen más de 1000 tipos de vodka, algunos de más de una centuria de antigüedad.

El museo muestra maquinaria antigua que se usaba en la elaboración de la bebida rusa por excelencia y una extensa colección de botellas y etiquetas.

El Museo Hidroeléctrico

Si has decidido viajar a Uglich con niños, quizá la idea del Museo del Vodka no sea la mejor, pero siempre puedes acercarte al Museo Hidroeléctrico, galardonado con uno de los premios a los mejores museos regionales del país. Se trata de un museo muy interactivo y perfecto para familias.

Ahora que la preocupación por el medio ambiente es un tema candente, aprender cómo nació y se desarrolló la industria hidroeléctrica, una de las fuentes de energía más ecológicas que existen, es un buen modo de pasar parte de las vacaciones.