Qué ver en Suiza

Zermatt

Quizás Zermatt sea el destino más icónico de Suiza por estar al pie del Matterhorn, una de las montañas más famosas del mundo ubicada en el corazón de los Alpes que se eleva cual pirámide perfecta por encima de la ciudad y la estación de esquí más alta del país. Un viaje a Zermatt representa una vía de escape para abrazar la naturaleza, donde los picos imponentes y los lagos glaciares son el escenario perfecto para unas vacaciones inolvidables. Esquiar, hacer senderismo o simplemente admirar los paisajes, son las actividades más populares en la ciudad.

Con una arquitectura alpina que recuerda a una caja de bombones y su ambiente familiar, Zermatt es un destino turístico ideal que cautiva por sus paisajes tranquilos y sus excelentes comodidades como acogedoras opciones de alojamiento, elegantes bares y restaurantes y tiendas de lujo. 

Los visitantes disfrutan de las pistas de esquí durante todo el año y en el verano, cuando la mayor parte de la nieve ha dado paso a los verdes prados, la ciudad se convierte en un centro base popular para los escaladores alpinos y los entusiastas del senderismo y de las actividades al aire libre.

Para evitar la contaminación del medio ambiente natural, no se permiten automóviles dentro de Zermatt, por lo que la forma más fácil de llegar a la ciudad es en tren. De hecho, es un punto de partida para el famoso viaje en el tren Glacier Express, que atraviesa los Alpes suizos hasta St. Moritz. La ciudad se puede explorar cómodamente a pie, aunque hay disponibles servicios de transporte y taxis electrónicos. Para aventurarse aún más lejos, hay innumerables líneas de teleférico y una góndola que te lleva entre las pistas de esquí, los miradores y las principales atracciones de montaña.

Qué hacer en Zermatt:

Rodeada por algunos de los paisajes más bellos e inimaginables, la ciudad ofrece multitud de opciones deportivas , como esquí, snowboard y senderismo. Una de las actividades más emocionantes para hacer es ascender al Matterhorn Glacier Paradise, situado a 3883 metros sobre el nivel del mar. Para llegar a esta elevada atracción, hay que subirse al teleférico más alto del mundo y disfrutar de las increíbles vistas de los picos nevados a lo largo del camino. Una vez allí, se puede divisar un paisaje espectacular, con 14 glaciares y 38 picos por encima de los 4000 metros de altura. La plataforma panorámica de 360 ​​grados es la mejor experiencia alpina que se puede tener, solo superada por escalar la cima de la montaña uno mismo. 

Además, los más románticos pueden unirse a las miles de parejas que han colocado un candado del amor en la barandilla. Otro punto culminante incluido en la experiencia Matterhorn es el Glacier Palace, hogar de hermosas esculturas de hielo. Para ver el Matterhorn desde una perspectiva diferente, otra opción es tomar el teleférico a Rothorn para disfrutar de la impactante panorámica desde un mirador de 3103 metros sobre el nivel del mar.

De vuelta en la ciudad de Zermatt, se puede indagar todavía más sobre el icónico pico y su importancia en el Museo Matterhorn, que alberga interesantes exposiciones sobre las expediciones al Matterhorn y la historia del montañismo en la región.

Otro lugar maravilloso para ver en Zermatt es Gorner Gorge, a tan solo 20 minutos a pie de la ciudad. Este impresionante desfiladero fue formado por el río Gornera hace más de mil años y está lleno de formaciones rocosas únicas y hermosas cascadas.